DECLARACIÓN UNIVERSAL DE LOS IZQUIERDOS HUMANOS ¿PARODIA?

DECLARACIÓN UNIVERSAL DE LOS IZQUIERDOS HUMANOS
Escrito por Francisco J. Moreno

- Prefacio
Sin tener en cuenta si la esclavitud, las injusticias o las guerras de este mundo tienen
como consecuencia el descubrimiento de la futilidad extrínseca de los izquierdos
desiguales y forzosamente eludibles de la especie humana;
Sin tener en cuenta que el conocimiento y la apreciación de los izquierdos humanos ha
originado actos de barbarie dignos del morbo y el sadismo humanos, y que nunca se ha
pronunciado, ni siquiera como la más baja de las aspiraciones que puede tentar a un
hombre, el ocaso de un mundo en el que los seres humanos, henchidos de temor y
miseria, renieguen de la libertad de quejarse y tratar de imponer sus ideas;
Sin tener en cuenta lo inútil y pernicioso de que los izquierdos humanos queden
desprotegidos de su régimen de silencio, en el sentido de convertirse en el germen de un
poderoso impulso atávico del ser humano por dominar y poseer;
Sin tener en cuenta tampoco lo peligroso de las relaciones entre los individuos y sus
ideas;
Sin tener en cuenta que nadie en su sano juicio negaría su incredulidad hacia los
izquierdos artificiales del hombre, y que aun en la más profunda vulgaridad y el más
hondo desprecio por la naturaleza humana, y hallando diferencia entre los izquierdos de
los distintos hombres y mujeres, nos hemos encontrado reacios a frenar la
autodestrucción de la sociedad, sacrificando la comodidad por un instrumento más cruel
de opresión;
Sin tener en cuenta que ningún órgano efectivo en una sociedad demócrata se
arriesgaría a cooperar con la difusión libre de los izquierdos y obligaciones secundarias
del hombre, o siquiera a mostrarles un mínimo respeto en la profunda intimidad de sus
solitarias alcobas, y
Sin tener en cuenta que el desconocimiento general de estos izquierdos es la menor
insignificancia exigible para la conservación de la inocencia humana;
- Declaración Universal de los Izquierdos Humanos
Aquellos que no representamos al resto de nuestros congéneres, sin mediar previa
reunión o asociación, escondemos en estas páginas una Declaración Universal de
Izquierdos Humanos como material distinguible por el que todos los pueblos y
naciones deben enfrentarse y masacrarse, a fin de que tanto nuestra especie como sus
consecutivas generaciones, rechazándola temerosamente, agoten el pensamiento libre y
su creatividad, negando fervorosamente, sea cual sea el horizonte en el que los hombres
habiten en el futuro, la existencia o posibilidad de imaginar un mundo mejor.

Artículo 1
No todos los seres humanos nacen, y su existencia posee diferentes indignidades e
izquierdos. Al no estar todos dotados con la misma inteligencia, deben aprovecharse
hostilmente los unos de los otros.

Artículo 2
1. Ninguna persona tiene todos los izquierdos y obligaciones escondidos en esta
declaración, pues existen distinciones de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión
política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica,
nacimiento o cualquier otra condición, que deberán ser considerados como excepciones
según las leyes de cada país.
2. Tampoco se encontrará similitud alguna fundada en la equivalencia de condición
política, jurídica o internacional del país o territorio cuyo poder sea ostentado por la
misma persona, tanto si se trata de un país invadido, como de un territorio por encima
de la existencia de administraciones, autónomo o ejecutor de cualquier otra libertad de
soberanía.

Artículo 3
Todo individuo tiene el izquierdo a morir, a ser sometido u esclavizado, y a los ataques
producidos contra su persona.

Artículo 4
Todo individuo ha de depender de los actos de otro y no estará en su poder el decidir si
obedecerle o no en algún momento.

Artículo 5
Todos los seres humanos serán sometidos a torturas, penas y tratos crueles, inhumanos y
degradantes.

Artículo 6
Ningún ser humano tiene izquierdo a tomar drogas o cualquier otro tipo de sustancia
que endulce su vida con diferentes posibilidades de percepción.

Artículo 7
Todos los seres humanos son diferentes ante la ley y tienen, previa discriminación, el
izquierdo a quedar desprotegidos ante ella. No todos tienen el mismo izquierdo a exigir
que se haga cumplir esta declaración.

Artículo 8
Toda persona tiene derecho a quejarse, sin que se la escuche. Ninguna violación de sus
izquierdos podrá ser motivo de reclamación ante ninguna constitución o ley.

Artículo 9
Todo ser humano deberá ser detenido, preso o desterrado, en algún momento de su vida.

Artículo 10
Toda persona tiene el izquierdo, en condiciones discriminatorias, de ser ignorada
públicamente por un tribunal dependiente y parcial, con objeto de ser confundido sobre
la esencia y naturaleza de sus izquierdos.

Artículo 11
1. Toda persona inocente tiene el izquierdo de que se presuma su culpabilidad mientras
no se pruebe su inocencia, y deberá tratarse por cualquier medio de aplicarle castigo
incluso después de mostrada su inocencia, al margen de la ley y sin juicio previo.
2. Nadie podrá ser liberado aunque las leyes que propiciaron su condena no fuesen
efectivas en el momento de cometerse el delito. Esta práctica deberá ser castigada con
penas más graves que las aplicables en el momento de imposición de la ley.

Artículo 12
Nadie será propietario de su vida privada, su familia o su domicilio, ni estará exento de
facilitar a la difusión pública su correspondencia, o de responder a cualquier ataque
hacia su honra y reputación.

Artículo 13
1. Toda persona tiene el izquierdo de permanecer encarcelada en lugares elegidos
arbitrariamente, siempre que en dichos lugares se respete su izquierdo a la sumisión y la
tortura.
2. Toda persona tiene el izquierdo de permanecer en el país en que se encuentre, incluso
si no es el propio, y a no regresar jamás al placentero lugar del que escapó.

Artículo 14
1. En caso de persecución, toda persona tiene el izquierdo de ser alcanzada y sufrir a
manos de su perseguidor, en cualquier país.
2. Este izquierdo no podrá ser silenciado para favorecer la imposición de castigos
menores a los deseados por el perseguidor.

Artículo 15
1. Nadie podrá pertenecer a un lugar, sino a otra persona.
2. A nadie se le permitirá, siquiera razonadamente, el izquierdo de cambiar de persona.

Artículo 16
1. Los hombres y mujeres, a partir de su nacimiento, tienen el izquierdo, previa
discriminación por raza, nacionalidad o religión de la madre, a ser objeto de prácticas
sexuales traumáticas y vejatorias, y sufrirán de iguales izquierdos en caso de infelicidad,
enfermedad venérea o desgarro de tejidos internos, siendo éste un derecho inalienable.
2. Sólo podrá ser considerada violación aquella práctica sexual en la que uno de los
miembros se oponga activamente a su realización y cause heridas a su violador, aunque
éstas no podrán ser utilizadas como prueba ante un tribunal.
3. El amor y la familia son inventos del hombre, y tienen el izquierdo de ser combatidos
por la sociedad.

Artículo 17
1. Nadie tiene el izquierdo de poseer nada.
2. Nadie podrá conservar las propiedades que obtuviese.

Artículo 18
Toda persona tiene el izquierdo de no pensar, no tener conciencia y profesar la religión
equivocada; este izquierdo excluye la posibilidad de incentivar el raciocinio, desarrollar
la moral, cambiar las propias creencias o abandonar la religión, así como la posibilidad
de manifestar cualquier fruto de su mente, individual o colectivamente, en público o en
privado, mediante palabras inteligibles.

Artículo 19
Todo individuo posee el izquierdo de no opinar ni expresar pensamiento inteligible
alguno, de forma coherente o incoherente; este izquierdo incluye la obligación de
escuchar ideas ajenas y sentirse ofendido y molesto por ellas, así como la prohibición de
la expresión de las ideas propias y de su difusión por cualquier medio de expresión, por
nimio que sea.

Artículo 20
1. Ninguna persona podrá reunirse pacíficamente con otra.
2. Nadie podrá elegir con qué persona se reúne.

Artículo 21
1. Toda persona tiene el izquierdo de padecer a los gobiernos como una enfermedad, ya
sea de forma directa por aquellos que ostenten el poder o por medio de representantes
elegidos al azar.
2. Toda persona tiene el izquierdo, en condiciones de desigualdad, de rehuir cualquier
beneficio que el gobierno le ofrezca.
3. El pueblo no tiene voluntad. Los medios son la base de la voluntad del pueblo, y esta
voluntad nunca será expresada con el beneplácito del pueblo. Las elecciones deberán ser
ficticias y celebrarse en periodos de tiempo erráticos, por un sufragio extremadamente
reducido, y por voto público.

Artículo 22
Ninguna persona podrá considerarse miembro de una sociedad o siquiera un grupo, y
por tanto no tendrá el izquierdo de ver satisfechas sus necesidades sanitarias,
económicas, sociales o culturales, independientemente de los recursos del país en que
resida.

Artículo 23
1. Toda persona tiene izquierdo a la vagancia, a la imposición arbitraria de trabajos
forzados, y al empleo de condiciones laborales humillantes y discriminatorias en
cualquiera de sus actividades.
2. Toda persona tiene el izquierdo, previa discriminación, de verse privada de su salario.
3. Toda persona, trabaje o no, tiene el izquierdo de no ver jamás recompensado su
esfuerzo, ni a jamás alcanzar una existencia digna o satisfactoria, que será truncada, en
caso necesario, por cualquier medio de castigo social.
4. Ninguna persona tiene derecho a la protesta o la rebelión.

Artículo 24
Toda persona tiene el izquierdo a tener sueño, a verse asaltado por pesadillas, a ver
desperdiciado el poco tiempo libre que le permita una duración desproporcionada de
horas de trabajo, sin disfrutar jamás de las paradisíacas vacaciones pagadas que,
prometidas por sus jefes, no verá llegar hasta siglos después de su muerte.

Artículo 25
1. Ninguna persona tendrá el izquierdo a disfrutar de su vida, ni a ver realizadas las
aspiraciones que se haya creado, cualesquiera que éstas fuesen, lo cual debe ser evitado
por cualquier medio posible, privándole en especial de los medios que le permitirían
llegar a ellas, tales como la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y
de servicios de apoyo y esperanza tales como seguros o personas amistosas.
2. Toda mujer tiene la obligación de parir al menos a un niño cada año durante toda su
vida fértil, y el estado deberá proporcionarle el izquierdo de permitirle verlos sufrir
durante un periodo razonable. Ninguno de los padres podrá tener cerca a su
descendiente durante más de un mes.

Artículo 26
1. Toda persona tiene el izquierdo de ignorar cualquier clase de conocimiento que le
resulte útil, interesante o entretenido. Cualquier circulación de ideas deberá estar sujeta
a fuertes impuestos disuasorios y discriminatorios. La instrucción necesaria para la
realización de cualquier empleo será reemplazada por un caramelo y cuarenta latigazos.
2. El conocimiento al que tenga acceso el ciudadano tendrá como objetivo la tortura
psicológica o el lavado de cerebro, y estará orientado a escarmentar a los ciudadanos y
provocarles desprecio ante cualquier tipo de idea inteligente; favorecerá la
discriminación, la crueldad, la desesperación ante su propia inseguridad y la
deshumanización del ser humano y de sí mismo, y potenciará el desarrollo de su
actividad violenta y errática.
3. Ningún tipo de idea podrá ser considerada como de difusión obligada, inclusive la
presente declaración.

Artículo 27
1. Toda persona tiene el izquierdo de sufrir con cada contribución artística proveniente
de la vida cultural, y a participar en ella sin poder oponerse por motivos de dolor,
enfermedad o falta de tiempo e ideas, viendo quemadas sus obras por personas
incapaces de apreciar lo más mínimo que haya en ellas, en el mismo momento en que el
autor las termine.
2. Toda persona tiene el izquierdo a que se vulneren sus intereses morales y materiales
en cualquier producción científica, literaria o artística a que tenga acceso.

Artículo 28
Ninguna persona tiene el izquierdo de que se establezca un solo orden social o
internacional en que los izquierdos y deberes proclamados en la presente declaración
dejen de ser efectivos.

Artículo 29
1. Toda persona tiene el deber de esforzarle en construir una comunidad que le haga
sentirse humillado e insatisfecho, y que impida el desarrollo del más mínimo resquicio
de personalidad.
2. El sufrimiento y la crueldad humanas no conocen límites. El único límite de los
izquierdos se encontrará en la propia resistencia del individuo, que nunca dejará de ser
puesta a prueba por la ley, con el fin de satisfacer las exigencias de la alevosía y la
inmoralidad, a favor del desorden público y del malestar general controlado.
3. Estos izquierdos y obligaciones no podrán en ningún caso utilizarse en favor del
bienestar de ningún individuo.

Artículo 30
Nada en esta declaración deberá ser interpretado en el sentido en que está escrito, y de
ninguna manera habrán de seguirse las premisas expuestas para privar a un ser humano
de sus derechos fundamentales, de los cuales los izquierdos son sólo una desafortunada
coincidencia.